Soy un niño que está aprendiendo a ser jugador

” Soy un niño que está aprendiendo a ser jugador. Soy un entrenador que está aprendiendo a ser entrenador. Soy una persona que está aprendiendo a querer aprender siempre.”

Bajo estas premisas estoy seguro que vamos a conseguir hablarnos mejor a nosotros mismos cuando fallamos, o cuando no sabemos valorarnos lo suficiente, o cuando la opinión de los demás nos pesa en exceso y más de lo necesario. Y también vamos a saber hablarle mejor a los demás… a esos que fallan igual que fallamos nosotros.

En el fallo está el aprendizaje. En la gestión del error y en entender lo que sucede está la diferencia entre unos y otros. A menudo es ahí donde reside la vitamina para tener más o menos autoestima.

Si queremos aprender siempre, ya andamos ganando uno cero desde el minuto uno, ya que detrás de querer aprender se esconden los motivos que nos mueven, el sacrificio, la pasión, la voluntad, la valentía y el coraje. Si tuviera que enseñar algo a alguien me gustaría poder enseñarle a querer aprender siempre.

A veces penalizamos y lamentamos en exceso el error ajeno y el nuestro. En los niños deportistas aún más.

Os digo con la mano en el corazón que muchas veces no veo jugadores… veo niños que están aprendiendo a ser jugadores… y ahí es cuando entiendo y relativizo el error y tomo conciencia de que tengo que ofrecer lo mejor de mi, para poder ayudarle y acompañarle mejor.